VALE LA PENA

Uno de mis escritos favoritos en el blog es en el que describo como la copa de los árboles y la briza deleitan mis sentidos cuando realizan una especie de danza, para mí casi celestial, la cual produce un sonido que al cerrar los ojos me hace sentir como si estuviera escuchando las olas del mar mientras la sueve brisa que se siente en mi cuerpo como suaves caricias me eriza la piel. Justo esta noche vuelvo a respirar, cerrar mis ojos y me sumerjo en una especie de trance que me hace sentir lo que sentí aquel día que me inspiró a describir ese inefable momento cuando caminaba mientras los pinos y el viento bailaban un suave vals a mi alrededor.

Hace mucho que no sentía tanta necesidad de que mis dedos actuaran como por impulso, como si fueran independientes y tuvieran vida propia. Hace mucho que la inspiración de vaciar mis sentimientos y sentir como mi alma se libera un poco, no llegaba a mí, y no me refiero a una inspiración superficial, sino a algo mas profundo, tan intenso que siento que cada palabra que plasmo aquí me genera una extraña sensación de nostalgia.

En este tiempo he conectado profundamente con una parte de mi ser que creí que ya no existía, que nunca más volvería a mí. Esa pequeña parte en realidad tiene un poder tan inmenso que demuestra que a veces aquello que consideramos lo más frágil, débil o mínimo es en realidad lo más fuerte, lo más importante, lo más intenso.

Las ganas, el deseo, la inspiración, el impulso o como le quieran llamar, ese sentimiento de querer y desear con inmenso anhelo y emoción hacer las cosas que te gustan, que te hace sentir vivo, y al mismo tiempo redescubrir viejas pasiones y descubrir nuevas. A esto es a lo que me refiero, esa pequeña pero indudablemente significativa y esencial parte de mí.

Vivir sin propósito, sin metas, sin ganas, sin anhelos o con un ferviente amor por algo, lo que sea, no es vivir; se los puedo asegurar. No hay manera alguna que se pueda llamar vida a aquello que no encuentra un sentido por el cual seguir, por el cual estar vivo.

Vivir es conectar, escuchar, emocionarte, luchar, desear, experimentar, crecer, amar, confiar en el proceso, hacer nuevas cosas y recordar el por qué te gustan la viejas, mirar a los ojos, tocar almas, abrazar fuerte, sonreír hasta con la muela de atrás. Vivir es sentir, sentir que estás aquí por algo y para algo y descubrir el por qué o el para qué.

Con total certeza puedo decirles que me siento viva. Con toda certeza les aseguro que estoy viviendo, que estoy siendo yo, trabajando por mí y para mí, disfrutando cada momento, desde el amanecer, hasta el atardecer, desde el despertar, hasta el dormir, desde lo positivo hasta lo que no lo es tanto, desde los si y los no, desde el alma, a través de todos mis sentido, de la cabeza a los pies.

P.D. ¡HEY!… LA VIDA ES MUY CORTA COMO PARA GASTARLA PERDIENDO EL TIEMPO HACIENDO COSAS QUE NO TE HACEN FELIZ, AFERRANDOTE A PERSONAS, VIEJOS AMORES Y RECUERDOS DE LO QUE FUE Y YA NO SERÁ. MIRA HACIA DELANTE. EL CAMINO A LA FELICIDAD LO CONSTRUYES TÚ. NO ES FACIL, PERO, ¿SABES QUÉ?… VALE LA PUTA PENA.

With all my soul, Franselis 🌱💛

SALUD MENTAL – ALTAS Y BAJAS.

En la vida nada es lineal, todo se encuentra en constante evolución, constante cambio, constante movimiento. Las subidas y bajadas son las que caracterizan a este peculiar e impredecible viaje.

Esto se da en todos los ámbitos de nuestras vidas, sin embargo, quiero centrarme en el mundo de la Salud mental, llevando así la línea y haciendo honor al concepto de este blog. Aquello para lo que fue creado desde un inicio; alzar la voz para hacer eco de la importancia de la salud mental y llevar un poquito de consuelo y esperanza a personas que estuvieran atravesando el mismo proceso que yo, personas valientes y fuertes en corazón, alma, y espíritu.

Quienes tenemos transtornos mentales, como en mi caso, ( transtorno depresivo mayor y transtorno de ansiedad generalizada) entendemos lo frustrante y duro que es llegar a un punto dónde sientes que estás retrocediendo . Un punto dónde temes estancarte y jamás salir.

Justo en este momento estoy en ese punto. Entre el doy un paso y retroceso cinco, entre el tener que hacer y el prácticamente obligarme a hacerlo porque no tengo «ganas» o «fuerzas». Me encuentro en un punto en el que me cuestiono si lo estoy haciendo bien, si estoy dando todo de mí.

Un punto en el que lloro porque tan sólo imaginarme volver al lugar en el que estaba hace un año me da pavor. Y recordar todo el sufrimiento,miedo y frustración, ansiedad, tristeza me llevan a un lugar obscuro.

Sé que no sólo es mi caso. Sé que es el caso de millones y millones de personas en el mundo que buscan aquella pequeña luz al final del túnel y hacen hasta lo imposible para no retroceder, para seguir luchando y dandolo todo.

Casi toda mi vida he peleado contra esto y han sido incontables las veces en las que he caído y he creído que me quedaré en el polvo, pero no, porque han sido más las veces en las que me he levantado y vuelto al ruedo. Han sido más las veces en las que he sacado fuerzas de no sé dónde y he rogado a Dios y mis ruegos han sido contestados.

Si hoy estoy aquí es porque hay un fuego dentro de mí que no me deja darme por vencida y que puede más que cualquier caída. Puedo llorar, puedo gritar, puedo enojarme, pero nunca volver hacía atrás, ni para coger impulso.

A tí que estás leyendo esto te digo que lo que sientes es válido, que llorar está bien, que está bien no estar bien . Pero sobre todo que está prohibido rendirse a pesar las bajas, a pesar de los días no tan buenos y las noches de insomnio que traen tantos pensamientos a tú cabeza. Rendirse no es una opción.

Franselis – FACINGLIFE ✨💛

YO SOY EL SOL.

Mucho tiempo he pasado en la obscuridad, divagando por ahí. Sin rumbo ni punto fijo. Mucho tiempo he estado atrapada en un sitio no muy agradable, en ciertas ocasiones.

Todos tenemos esa voz en nuestra cabeza que nos habla, pero cuando esta te dice y empuja a hacer cosas en contra de tú salud mental, ya se convierte en una batalla, una contigo mismo. Una batalla interna que roba tu energía y te coloca en un cuarto negro dónde no puedes ver tus manos delante de tu cara.

En carne propia he librado esa batalla donde a veces gano yo, y a veces gana mi mente. Una mente lastimada y cansada de tanto luchar. Luchar contra si misma y contra el mundo, contra gente que me considera un bicho raro.

Hace poco alguien me dijo que soy como el sol, que soy especial y un ser único. Al salir de mi boca las siguientes palabras – «Soy una nube gris», Me dijo lo siguiente: – «Nooo. Eres un Sol. La nube gris, vive en los demás. Ellos son los que no tienen colores y son todo superficialidad y sin sentido. Lo que pasa es que ser tan especial como eres, hace que en ocasiones creas que eres un bicho raro. Y eres una rareza, pero una maravillosa rareza, un hermoso unicornio. Un Sol, donde solo hay oscuridad». Él dirigió así mí algunas de las palabras más hermosas que alguien jamás ha dedicado a mi persona.

Ahí entendí que yo brillo con luz propia, que soy un hermoso bicho raro, un sol radiante que tiene la capacidad de resplandecer y convertir la obscuridad en luz. Soy alguien realmente especial, cómo también lo eres tú, que estás leyendo esto.

No debemos dejar que el yugo de la obscuridad nos invada, que nos hunda en las profundidades. Cada uno de nosotros es importante y especial para alguien. Cada uno de nosotros debemos darnos importación y sentirnos especiales en nuestra propia piel.

Recuerda, tú brillas por tí sólo, porque tú eres el sol.

FRANSELIS – FACING LIFE 💛✨

QUE BUENA ESTOY.

«Me da miedo hablar delante de la gente», «Quiero hacer esto, pero me juzgarán», «Me están mirando, deben estar hablando de mí», «mejor no expreso mi opinión, nadie la tomará en cuenta», «Está ropa me qué horrible, los demás se van a reir de mí «, «Estoy muy flaca», «Soy una gorda horrible», «nadie se fijará en mí»… Estas son frases o pensamientos clásicos de aquellos cuya vida se basa en la opinión de los demás, aquellos que no hacen las cosas por miedo al qué dirán y cuya autoconfianza se la ha llevado el viento o simplemente nunca existió, nunca se desarrolló, quizás por situaciones traumáticas, palabras hirientes, personas horribles que se sienten superiores haciendo sentir a los demás inferiores, y quizás debido a su gente más cercana: familia y amigos.

Imagínense vivir bajo la sombra de los demás, vivir con miedo de ser uno mismo, escondernos y encerrarnos , no salir al mundo a mostrar lo que realmente somos, sentirnos inferiores; sé que cada uno de nosotros en alguna ocasión ha experimentando ese sentimiento de inseguridad que no nos permite ver lo que realmente somos y lo que realmente valemos, un sentimiento tan abrumador que nos mantiene viendo a los demás por encima de nosotros y nos vemos a nosotros mismos como seres diminutos, rezagados y vulnerables.

Yo me he sentido de esa manera, tan pequeña e insignificante, tan débil e invisible, siempre comparandome con los demás, siempre buscando algo malo en mí y obviando todas aquellas grandes cualidades que poseo. Mi confianza era nula, prácticamente no existía; lo único que se hacía presente era una horrible sensación que me hacía ver a los demás en las altura, mientras yo estaba en el suelo. En mi caso todo esto comenzó en la adolescencia y desde hace poco estoy intentando dejarlo en el pasado y mostrar la persona que realmente soy y la persona que aspiro llegar a ser.

Lo primero es aceptar que nadie es más ni menos que los demás. Cuando dejamos atrás ese sentimiento de inferioridad estamos dando el paso inicial de un largo proceso, un proceso que valdrá la pena. Yo me encuentro en un punto en el que intento ver todas aquellas cualidades que poseeo y me hacen única, aquellas pequeñas cosas que conforman mi escencia. Debo admitir que se me olvida muy seguido, pero siempre hay alguien allí afuera que me lo recuerda, que ve en mi lo que yo debo ver.

La confianza en uno mismo es un factor determinante para crecer y alcanzar aquello que se quiere. Confiar en nosotros mismod nos hace sentir invencibles, que podemos y somos capaces de alcanzar y hacerlo todo.

Sé que es difícil pero una vez que estás dispuesto a confiar, nada te detendrá. Debes decirte a tí misma/o todas esa cosas que te hacen grande, que te hacen ser tú. Tienes que mirarte al espejo y decir: soy capaz, puedo con todo, soy hermosa/o, inteligente…mírate de pies a cabeza y agradece.

En mi proceso he hecho pequeños cambio, pero que significan un mundo para mí… He decidido cambiar mi estilo de peinado, ponerme ropa que nunca hubiese usado antes, expresar mis sentimientos, poner en su puesto a aquellos que se creen más, aprendí a maquillarme, no lo hago con mucha frecuencia, pero cuando lo hago yo misma me halago, me paro delante del espejo del baño, sonrío y me digo lo linda que soy y lo buena que estoy. Es un camino difícil en el que no siempre te sientes cómoda/o con tigo misma/o, pero son más los momentos gratificantes.

Confía en tí, en lo eres capaz de hacer, en tú valor, en tus atributos, tú habilidad. La vida es muy corta para vivir con limitaciones, sintiéndote como un cero a la izquierda. Vive como si te fueras a comer el mundo, pero recuerda, siempre respetando y sin pisotear a los demás, porque aquí hay cabida para todos.

P.D: Ponte esa ropa que siempre quisiste ponerte.

P.D2: Di algo que te hayas estado guardando.

P.D3: Mírate al espejo, desnud@, con ropa, como sea y hazte cumplidos, no sólo sobre tú cuerpo, también sobre tú personalidad, mente, tú espíritu, tú alma.

P.D3: Escucha «En guerra» de Sebastián Yatra y Camilo.

Franselis – FACING LIFE 💛✨

VIDA – VERÁS, OIRÁS, SENTIRÁS Y TE PREGUNTARÁS.

Fhotoswithsoul💚

Estás en el vientre de tu madre, un pequeño espacio que será tú hogar por los próximos 9 meses ( regularmente). Ahí te va a alimentar a través de un cordón conectado a tu ombligo y verás el mundo a través de los latidos del corazón de tú mami.

Naces, abres tus ojos y ves el mundo por tí mismo por primera vez. Aún no eres consciente, actúas por instinto y necesitas del completo y complejo cuidado de quienes se hacen llamar tus padres, dos seres que tendrán que alimentarte, protegerte, educarte, guiarte….

Vas creciendo y vas desarrollando tu personalidad, vas haciendo cosas por tí mismo y vas descubriendo cada día nuevas cosas. Llega una edad en la que ya eres absolutamente conciente de todo, sabes como se supone que debes actuar según de las imposiciones de la sociedad, cuales cosas se consideran correctas y cuales no, de acuerdo a los demás. Desarrollas tú propia opinión, tú propia voz y decides en que creer y en qué no.

Siempre necesitarás de tus padres pero sabes que debes salir al mundo y aprender a vivir por tí mismo. En el proceso te vas dando cuenta de que hay palabras que pueden herir incluso más que las acciones, que la maldad existe, pero la bondad predomina, que habrán personas que llegarán y se irán, y todo eso con un propósito, créeme, algo te enseñará. Verás y oirás y sentirás tantas cosas. Verás como habrán quienes sufran por dentro, pero aún sonrían con el alma rota, verás como se cometen injusticias descaradas, como algo superficial se convierte en algo más importante de lo que realmente debería importar, verás a niños con todo y a otros sin nada, a personas sufrir por estupideces y a otras por cosas desgarradoras, personas luchando con su salud mental, personas que lo superan y aquellas que se quedan en el camino.

Oirás, oirás demasiado, palabras que te marcarán y otras a las que no le tienes que hacer caso porque son como el veneno de una serpiente, solo quieren causar daño, oirás verdades que se esconden detrás de «juegos», oirás a las personas pelearse por cosas insignificantes, oirás risas tan sinceras que te harán sonreír a tí también, oirás el zumbido del viento y el canto de las aves, a los perros ladrar de felicidad y aullar de dolor, a padres expresando cómo aman a sus hijos y a otros repudiandolos, oirás palabras despectivas, pero también cumplidos sinceros hacia tu persona que te harán darte cuenta lo valioso que eres para alguien más.

Sentirás, mierda, sentirás el dolor de los demás,pero también sus alegrías , o quizás sentirás envidia, odio, tristeza, arrepentimiento. Sentirás amor, porque te enamorarás, – a mis 20 años aún no lo he hecho-, pero te aseguro que pasará y te sentirás en el cielo, y sí, puede que te rompan el corazón, pero volverás a enamorarte. Nadie se libra de amar aunque así quiera.

Creo que a todos nos llega un punto en el que nos cuestionamos, nos preguntamos: ¿Quién soy?, ¿Quien quiero ser?, ¿A dónde pertenezco?. Yo lo he hecho infinitas veces y aún me quedan respuestas por descubrir. Unos tardarán más que otros en encontrar la respuestas a estas interrogantes.

Para responder estás preguntas, lucharas con mounstros invisibles, llorarás, experimentarás, exploraras, conocerás personas, lugares, olores, sonidos y sabores. Te pondrás a prueba y quizás tropezaras, estudiaras algo que no te apasiona y cuando te des cuenta estará en tí decidir si seguir o detenerte, serás juzgado si tú decisión es priorizar tu paz, pero también es muy probable que haya quienes te apoyen en todo el sentido de la palabra.

Irás descubriendo cuáles cosas te hacen tú, tú escencia, cuáles cosas te identifican, cosas que podrían parecer tan simples, como por ejemplo que te guste sentarte un rato al aire libre o beber una tasa de café en la mañana escuchando un poco de Jazz. Te darás cuenta de lo que te hace sentir el corazón lleno y lo que no, de lo que te divierte y lo que te enoja, de lo que quieres y lo que no.

Para encontrar respuestas lo único que tienes que hacer es vivir y en el proceso todo irá cobrando sentido. Cuando menos te lo esperes descubrirás a qué viniste a este mundo, tú vocación.

Quizás te sucedan cosas que requieran sanación, pero está bien, nadie está exento de ello. Yo estoy en un proceso de nación a través del cual me he ido dando cuenta de muchas cosas.

Me he dado cuenta que perteneces dónde te sientas amado y en paz, con quien se preocupe por tí y te respete, quien te diga la verdad a la cara. Perteneces a dónde estés por gusto y no por obligación, dónde le agradezcas cada día a Dios por estar allí.

Verás, oirás, sentirás y te preguntarás… Todo es parte de este viaje llamado vida. No siempre todo será bonito, no siempre estarás dónde quieras estar, no siempre tendrás el valor de marcharte, decir o hacer lo que deseas, pero siempre recuerda que habrá una oportunidad más de intentarlo aunque el tiempo pase muy rápido, siempre encontrarás una mano amiga, un nuevo amor, inspiración y fuerzas para seguir.

Al final, descubrirás quién eres, serás quien quieras ser y estarás justo donde perteneces, estoy segura… Y te lo dice alguien que a batallado y sigue buscando respuesta, pero que aún tiene esperanza y seguridad de que cada pieza se pondrá en su lugar, en el tiempo y momento perfecto. Así que vive y no te preocupes, Dios nunca falla.

P.D. Quiero pedir un gran favor… Siempre se amable, sueña, lucha, cuida de tí física, mental y espiritualmente, y por favor, nunca te rindas.

Franselis – FACING LIFE ✨💛

MI MAMÁ. 💛

Estoy segura de que todos hemos conocido a alguien cuya fuerza interior y determinación los hace grandes y los caracteriza. Personas que no le tienen miedo al trabajo y que el simple hecho de estar sin nada que hacer los inquieta. La laboriosidad está en su ser, es parte de ellos.

Yo conozco a muchos. Conozco a personas cuya vida se ha basado en el esfuerzo constante y trabajo duro. Conozco a seres increíblemente fuertes y cuya fuerza me inspira.

Como dije, conozco a muchos, pero hoy quiero hablar de la más importante de todas, la mujer que me dió la vida, la más luchadora, trabajadora y más increíble persona de espíritu incansable. La mujer a quien trabajar sólo la dignifica y exalta porque lo hace honradamente, lo hace con el corazón. Mi mamá.

Mi mamá no tuvo la oportunidad de ir a la escuela y aunque no me lo diga, aunque no salga de su boca lo mucho que ha sufrido y padecido, yo sé que lo ha hecho, sé que ha tenido que pasar por situaciones increíblemente difíciles que han puesto a prueba su fe y la han llevado hasta el límite. Mami ha hecho y hace todo lo que está en sus manos para que sus hijos -especialmente yo- salgamos adelante y rompamos con un circulo de falta de educación y penurias.

Ella, a la que he denominado “The hardest working woman” ha trabajo en todo lo que se les ocurra, pero eso sí, trabajos dignos y honrados. Si me pongo a contarles no termino hoy, pero con el simple hecho de yo saber que me pagó la universidad teniendo dos trabajos, limpiando casas, me hace sentir la persona más orgullosa del mundo, orgullosa de la mujer que es, orgullosa de que ese tolete de mujer sea mi madre.

Por mucho tiempo estudié algo que no me gustaba y la única razón por la que continuaba era ella. Ella no me obligaba a hacerlo, ni muchos menos, era que el yo saber el gran esfuerzo que ella hacía para cada mes tener el dinero de la Universidad, me partía el corazón y no me permitía tirar la toalla.

Un día ella supo que yo no era feliz, que el dolor me consumía y que esa carrera me hacía daño. Cuando ella se enteró, de mi boca, lo único que salió de la suya fue que a ella sólo le importaba que yo fuera feliz. Ese día no sólo confirmé su fortaleza, sino también su nobleza, y lo más importante de todo: – Ella es la mujer que más me ha amado y amará en este mundo-.

Escribo esto con los ojos rebosados de lágrimas, de dolor, pero más que todo lágrimas de admiración y emoción. Nunca tendré cómo pagarle todo lo que por mí ha hecho, cómo agradecerle el no rendirse con ella, y conmigo.

No se lo digo mucho, pero la amo con todo mi ser. Ella es mi inspiración y desearía ser aunque sea la mitad de la mujer que ella es.

Quizás ha cometido errores, pero eso es pasado. Lo que importa en este preciso momento es que la tengo conmigo y su ejemplo de trabajo incansable y honesto siempre irán colgados en mi corazón.

P.D: TE AMO, MAMI, Y TE ADMIRO. SIEMPRE LO HE HECHO.

Franselis – FACING LIFE 💛✨

TENGO MIEDO.

No sé si soy la única a la que le ha pasado que quiere algo intensamente, quiere hacerlo, pero simplemente no puede, algo la detiene. Pues por muchos años esto fue una constante en mi vida. Una constante desgastante, que me aprisionaba y mantenía siguiendo un horrible círculo vicioso, como quien hace lo mismo una y otra vez aunque salga lastimado una y otra vez. Hablo es pasado, pero la verdad es que sigue aquí, conmigo, acompañándome.

Hay algo en mi interior que siente un deseo y anhelo inmenso por la realización de ciertas cosas, pero también existe una pequeña pero persistente voz que me detiene. Se preguntarán cuál es la táctica que usa esta fastidiosa vocecita para hacerme desistir… Lo que hace es decirme todas y cada unas de las cosas, las razones, que me llevarán a arruinar eso que quiero tener.

Esto aveces se siente como una lucha entre un diablito y un angelito en mis hombros, sabiendo claramente cual de los dos es esta voz. Es una lucha que por alguna razón siempre termina ganando el lado malo, siempre termina siendo guiada por la duda y la inseguridad, y en pocas ocasiones el otro lado obtiene la victoria.

Quienes leen y siguen mi blog saben la razón por la que surgió el mismo, conocen mis luchas y batallas internas y son concientes de mi proceso de sanación. Las heridas que provocan años y años de dolor no se borran de la noche a la mañana, por más que queramos, por más que deseemos e intentemos es algo imposible.

El tiempo es clave y la determinación aún más. Sanar es mi meta, y en el proceso empezar a vivir es lo que que quiero. Cómo entenderán aveces se pone color de hormiga, se pone complicado y lo que un día dolió vuelve a doler, incluso igual o más fuerte.

El miedo es una de esas cosas que no desaparecen, y no me refiero a ese miedo común en todo ser humano, me refiero a ese miedo caracterizado por la inseguridad y confianza cero. Un miedo tan jodido que incluso cuando ya crees saber quién eres te hace dudar y tambalear. Un miedo que paraliza y te hace retroceder.

He evolucionado increíblemente, a un punto que a veces olvido a ese ser triste y gris que alguna vez fuí y qué uno que otro día vuelve a visitarme. Como quisiera ser capaz de permitirme hacer y sentir todo aquello que quiero, pero tengo miedo, esa es la verdad, tengo muchísimo miedo.

Espero muy pronto llegar a un punto en dónde pueda pasarme ese miedo por dónde no da el sol y plenamente ser, hacer y sentir. Es muy jodidamente frustrante, pero debo ser paciente, porque por más que desee algo las cosas no suceden de un día para otro, y menos cuando se trata de sanar, sanar en alma, cuerpo, mente y espíritu.

P.D: Tener miedo es normal, no luchar contra el, no, no lo es.

Relatos de un alma conciente.

RISAS

Escucho risas, a lo lejos. Al parecer se divierten mucho allí afuera. Algo de mi quisiera estar riéndose así en este justo momento, con él al lado mio y un millón de historias que ya hemos contado y escuchado Miles de veces pero aún nos hacen doblar de la risa, como el primer día.

COMO EL PRIMER DÍA

Desearía que todo fuese como ese primer día en que lo conocí, desearía que me viera, escuchara y hablara de la misma manera. Definitivamente las primeras veces son únicas e irrepetibles.

ÚNICOS E IRREPETIBLES

Únicos e irrepetibles son esos ojos color miel, eso ojos que guardan tanta dulzura, tristeza y amor en su interior. Únicos e irrepetibles como el primer atardecer que vía a su lado.

A SU LADO

A su lado, lo amargo se volvía dulce, la oscuridad se llamaba de luz y hasta lo malo era bueno. A su lado no me sentía una más del montón a su lado era el centro del universo, de su universo.

EL CENTRO DEL UNIVERSO

Lo miro de arriba a abajo, cada detalle, cada pequeño lunar, cada pestaña. Me dicen que pienso que es el centro del universo porque sólo hablo de él, y sí, lo es. Él es mi universo.

MI UNIVERSO

Creí que duraría para siempre. Mi universo sólo se refería a él y no, me dí cuenta que no podia ni puede ser así, porque en mi universo hay mucho más… Familia, amigos, metas, sueños…y cuando me dí cuenta de ello él ya me había hecho creer que él era el sol, pero no, se equivocaba porque en mi universo yo soy el Sol.

YO SOY EL SOL

Ahora percibo mi luz, las sombras no me cubren más. Mi alma proyecta luminosidad y ya nadie será el centro de mi universo, porque río como el primer día y ahora cada día es único e irrepetible, al lado de quienes me quieren. Definitivamente yo soy el sol.

AGRADECIDA

Cuando inicié con este blog no creí que fuese a durar ni siquiera una semana. Mis ánimos e interés por las cosas estaban por los suelos. Al principio tambien quise que fuese anónimo, pero luego pensé que yo no soy la única atravesando por procesos de ansiedad y depresión, no soy la única a quien la vida le duele aveces y cuya alma por momentos se siente vacía.

Ese momento de reconocimiento y aceptación en el que me dí cuenta que ocultar esto no serviría de nada, el momento en el cual reconocí que hablando sobre mi situación, mis retos, mis sentimientos y mi experiencia podría ayudar a alguien más, fue el momento en que decidí continuar y hacerlo como yo, cómo Franselis, una chica con Transtorno depresivo mayor y Transtorno de ansiedad generalizada, una chica cuya vida no debe, puede ni está definida por esos trastornos.

@Fhotoswithsoul

Esto ha sido como una bocanada de aire fresco, y también ha sido un reto, pero uno que decidí aceptar con valentía, -¿Por qué con valentía?… Pues porque no somos todos los que nos atrevemos a mostrar al mundo nuestros demonios, nuestras luces y sobras y somos aún menos los que lo hacemos sólo con el propósito de ayudar.

Ese propósito que me mueve es lo que ha mantenido este pequeño espaciado creado por mí, desde y con el alma, de pie. El sólo hecho de recibir mensajes de personas de todas partes expresando sus sentimientos al leer uno de mis escritos es el mejor motor para continuar.

@Fhotoswithsoul

¿Y saben qué?, esto también me ha ayudado a mí. Cada vez los nudos en la garganta son menos, la presión en el pecho ha disminuido y mi seguridad y autoconfianza han aumentado. Esto es lo más increíble, ayudo a los demás ayudándome a mi misma.

Tomar la decisión de hablar, expresarme y que mi testimonio, mis sueños, mis anhelos, experiencias y pensamientos sean leídos por personas de todo el mundo ha sido la decisión más retadora y a la vez más gratificante de toda mi vida. Esto se ha convertido en una especie de salvavidas que me mantiene a flote.

Este año ha sucedido tanto. Ha sido un año de confesiones, revelaciones, sanación, decepciones, dolor, lágrimas, miedos, despedidas, pero sobre todo de crecimiento.
Estoy tan agradecida con Dios y con ustedes que leen lo que escribo, con mi familia que no me ha dejado caer y con mi espíritu inquebrantable que se mantiene fuerte a pesar de los golpes. Creanme que no podría expresar en palabras todo lo que he padecido todos estos años, pero tampoco podría expresar lo bueno que Dios es y ha sido conmigo, a pesar del sufrimiento y el dolor.

Esto apenas comienza. Cada día vamos por más. El proceso de sanación es lento y tiene muchísimas altas y bajas, pero les aseguro que vale toda la pena, el sudor, las lágrimas y la vida.

Gracias por estar. Aquí seguimos, FACING LIFE.

Franselis – FACINGLIFE ✨💛

YO MEREZCO.

Yo merezco ser escuchada sin que juzguen.

Yo merezco expresar mis sentimientos sin que me hagan sentir culpable.

Yo merezco tener amigos reales, presentes e incondicionales. Amigos en toda la extensión de la palabra.

Yo merezco amar y ser amada. Sacar todo el amor que tengo guardado, listo para dar.

Yo merezco ser libre en cuerpo, alma, mente y espíritu.

Yo merezco vivir sin nudos en la garganta, presiones en el pecho y angustias en el estómago.

Yo merezco andar por la calle sin que me miren raro.

Yo merezco un hombro en el cual llorar.

Yo merezco unos brazos que me abracen hasta el alma .

Yo merezco que me conozcan.

Yo merezco plenitud y paz.

Yo merezco que mi alma no se apague, que siga brillando.

Yo merezco respeto y comprensión.

Yo merezco alegría y empatía.

Yo merezco llorar de felicidad y no de dolor.

Yo merezco, además de estar viva, vivir.

Yo merezco todo esto porque yo soy y doy todo esto.

Franselis – FACINGLIFE.💛✨



© 2022 FACINGLIFE Todos los derechos reservados.

_________________________________________________

I DESERVE.

I deserve to be heard without being judged.

I deserve to express my feelings without being made to feel guilty.

I deserve to have real, present and unconditional friends. Friends in every sense of the word.

I deserve to love and be loved. Bring out all the love I have stored, ready to give.

I deserve to be free in body, soul, mind and spirit.

I deserve to live without knots in my throat, pressure in my chest and anguish in my stomach.

I deserve to walk down the street without being looked at strangely.

I deserve a shoulder to cry on.

I deserve arms that hug me to the soul.

I deserve to be known.

I deserve wholeness and peace.

I deserve that my soul does not go out, that it continues to shine.

I deserve respect.

I deserve joy and empathy.

I deserve to cry with happiness and not with pain.

I deserve, in addition to being alive, to live.

I deserve all this because I am and I give all this.

Franselis – FACINGLIFE 💛✨

© 2022 FACINGLIFE All rights reserved.