Él.

¿Por qué perdí ese trabajo?

¿Por qué no recibí esa beca?

¿Por qué no funcionó ese negocio?

Uno y mil «porqués»

Esos son algunas de los cuestionamientos que nos hacemos cuando algo no pasa de acuerdo a lo que esperábamos, cuando se sale de nuestras manos o simplemente no es lo que queríamos. Son preguntas que a su vez conllevan sentimientos de impotencia que son totalmente válidos y que no nos pueden avergonzar o llegar ser juzgados por ellos.

Siempre hemos escuchado que todo pasa por algo, y pienso que es cierto. Pienso que las cosas no pasan sin una razón, que aunque al principio no podamos ver o entender, con el tiempo las respuestas llegan a nosotros de forma clara o quizás de una forma implícita.
Cuando algo sucede o no sucede como nos esperamos tiene su porqué. Las cosas no sólo pasan por simple casualidad.

Yo lo he comprobado en múltiples ocasiones, dónde en un inicio me he frustrado o hecho preguntas a las cuales no tenía respuestas, pero con el paso del tiempo me he dado cuenta del propósito con el cual sucedió todo. Mi última experiencia es muy reciente y me ha ayudado a reafirmar está creencia.

No te desesperes, ni te tortures sobre pensando, porque en la vida nada es casualidad. Dios tiene guardadas cosas increíbles para cada uno de nosotros, creelo, nada pasa sin Él.

Esto te ayudará a reafirmar tu fe y esperanza, tú confianza y seguridad de que todo lo que quieras quizás no llegue, mas todo lo que necesites sí lo hará. Su tiempo es perfecto y Él es bueno en todo momento.

Una nueva y emocionante etapa en mi vida.

Llegamos. Fuimos recibidos por un grupo de personas en cuyos rostros se observaba una alegría tan sincera, y no solo la obligación que conlleva su trabajo, sino algo genuino, desde el corazón.

Pancartas escritas a mano y música hermosa de fondo. Una bienvenida que nunca olvidaré, una bienvenida que quedará en mi memoria y corazón por siempre… ¿Por qué? – Porque fue la bienvenida a una de las etapas más importantes de mi vida, estoy segura-.

Recuerdo que cuando llegué a Unicaribe no hubo nada de eso. Nadie nos recibió, lo que me hizo sentir tan nerviosa, tanto, que la ansiedad ocasionó algunos incidentes embarazosos de los cuales prefiero no hablar.

El aula que me tocó estaba repleta. Yo, debido a la ansiedad, no me siento nada cómoda, rodeada de tantas personas, pero adivinen qué… No me importó. No lo hizo porque la vibra era positiva, quiero decir que todos los que estábamos ahí teníamos la emoción, orgullo y felicidad a flor de piel, era un sentimiento compartido.

Maribel, que vibra tan hermosa. Una maestra dinámica y divertida que me hizo sentir como si la conociera de toda la vida. ¡Qué espíritu tan alegre!.

Como saben, a mí me gusta observar detenidamente a las personas, algo así como mirar en su interior, y lo que vi en ella fue bondad infinita. Una mujer jovial, alegre, elocuente y con una inteligencia evidente.

Pasar casi un día completo allí, no fue nada fácil, fue agotante, pero al mismo tiempo tan gratificante. Fue un día para recordar, y más que fué una experiencia compartida con mi hermana y mi primo… ¿Qué más podría pedir?

Me encamino a estudiar algo que amo, mi hermana y primo me acompañan, estoy rodeada de gente increíble, los maestros son espectaculares. La vida es buena, retribuye, y lo hace con creces, lo está haciendo conmigo en este justo momento.

P.D. La vista desde allí arriba es espectacular.

P.D. Gracias a todos, gracias, UAFAM, gracias, Dios. Esta aventura apenas comienza.

Franselis – FACING LIFE ✨💛

VIDA – VERÁS, OIRÁS, SENTIRÁS Y TE PREGUNTARÁS.

Fhotoswithsoul💚

Estás en el vientre de tu madre, un pequeño espacio que será tú hogar por los próximos 9 meses ( regularmente). Ahí te va a alimentar a través de un cordón conectado a tu ombligo y verás el mundo a través de los latidos del corazón de tú mami.

Naces, abres tus ojos y ves el mundo por tí mismo por primera vez. Aún no eres consciente, actúas por instinto y necesitas del completo y complejo cuidado de quienes se hacen llamar tus padres, dos seres que tendrán que alimentarte, protegerte, educarte, guiarte….

Vas creciendo y vas desarrollando tu personalidad, vas haciendo cosas por tí mismo y vas descubriendo cada día nuevas cosas. Llega una edad en la que ya eres absolutamente conciente de todo, sabes como se supone que debes actuar según de las imposiciones de la sociedad, cuales cosas se consideran correctas y cuales no, de acuerdo a los demás. Desarrollas tú propia opinión, tú propia voz y decides en que creer y en qué no.

Siempre necesitarás de tus padres pero sabes que debes salir al mundo y aprender a vivir por tí mismo. En el proceso te vas dando cuenta de que hay palabras que pueden herir incluso más que las acciones, que la maldad existe, pero la bondad predomina, que habrán personas que llegarán y se irán, y todo eso con un propósito, créeme, algo te enseñará. Verás y oirás y sentirás tantas cosas. Verás como habrán quienes sufran por dentro, pero aún sonrían con el alma rota, verás como se cometen injusticias descaradas, como algo superficial se convierte en algo más importante de lo que realmente debería importar, verás a niños con todo y a otros sin nada, a personas sufrir por estupideces y a otras por cosas desgarradoras, personas luchando con su salud mental, personas que lo superan y aquellas que se quedan en el camino.

Oirás, oirás demasiado, palabras que te marcarán y otras a las que no le tienes que hacer caso porque son como el veneno de una serpiente, solo quieren causar daño, oirás verdades que se esconden detrás de «juegos», oirás a las personas pelearse por cosas insignificantes, oirás risas tan sinceras que te harán sonreír a tí también, oirás el zumbido del viento y el canto de las aves, a los perros ladrar de felicidad y aullar de dolor, a padres expresando cómo aman a sus hijos y a otros repudiandolos, oirás palabras despectivas, pero también cumplidos sinceros hacia tu persona que te harán darte cuenta lo valioso que eres para alguien más.

Sentirás, mierda, sentirás el dolor de los demás,pero también sus alegrías , o quizás sentirás envidia, odio, tristeza, arrepentimiento. Sentirás amor, porque te enamorarás, – a mis 20 años aún no lo he hecho-, pero te aseguro que pasará y te sentirás en el cielo, y sí, puede que te rompan el corazón, pero volverás a enamorarte. Nadie se libra de amar aunque así quiera.

Creo que a todos nos llega un punto en el que nos cuestionamos, nos preguntamos: ¿Quién soy?, ¿Quien quiero ser?, ¿A dónde pertenezco?. Yo lo he hecho infinitas veces y aún me quedan respuestas por descubrir. Unos tardarán más que otros en encontrar la respuestas a estas interrogantes.

Para responder estás preguntas, lucharas con mounstros invisibles, llorarás, experimentarás, exploraras, conocerás personas, lugares, olores, sonidos y sabores. Te pondrás a prueba y quizás tropezaras, estudiaras algo que no te apasiona y cuando te des cuenta estará en tí decidir si seguir o detenerte, serás juzgado si tú decisión es priorizar tu paz, pero también es muy probable que haya quienes te apoyen en todo el sentido de la palabra.

Irás descubriendo cuáles cosas te hacen tú, tú escencia, cuáles cosas te identifican, cosas que podrían parecer tan simples, como por ejemplo que te guste sentarte un rato al aire libre o beber una tasa de café en la mañana escuchando un poco de Jazz. Te darás cuenta de lo que te hace sentir el corazón lleno y lo que no, de lo que te divierte y lo que te enoja, de lo que quieres y lo que no.

Para encontrar respuestas lo único que tienes que hacer es vivir y en el proceso todo irá cobrando sentido. Cuando menos te lo esperes descubrirás a qué viniste a este mundo, tú vocación.

Quizás te sucedan cosas que requieran sanación, pero está bien, nadie está exento de ello. Yo estoy en un proceso de nación a través del cual me he ido dando cuenta de muchas cosas.

Me he dado cuenta que perteneces dónde te sientas amado y en paz, con quien se preocupe por tí y te respete, quien te diga la verdad a la cara. Perteneces a dónde estés por gusto y no por obligación, dónde le agradezcas cada día a Dios por estar allí.

Verás, oirás, sentirás y te preguntarás… Todo es parte de este viaje llamado vida. No siempre todo será bonito, no siempre estarás dónde quieras estar, no siempre tendrás el valor de marcharte, decir o hacer lo que deseas, pero siempre recuerda que habrá una oportunidad más de intentarlo aunque el tiempo pase muy rápido, siempre encontrarás una mano amiga, un nuevo amor, inspiración y fuerzas para seguir.

Al final, descubrirás quién eres, serás quien quieras ser y estarás justo donde perteneces, estoy segura… Y te lo dice alguien que a batallado y sigue buscando respuesta, pero que aún tiene esperanza y seguridad de que cada pieza se pondrá en su lugar, en el tiempo y momento perfecto. Así que vive y no te preocupes, Dios nunca falla.

P.D. Quiero pedir un gran favor… Siempre se amable, sueña, lucha, cuida de tí física, mental y espiritualmente, y por favor, nunca te rindas.

Franselis – FACING LIFE ✨💛